Al remate…Juan Galán-Ocaña Nogales. Recogiendo.

Si supiera mi amigo Juan con qué interés espero sus escritos, me cobraría. Y yo le pagaría sin pena.
Esta vez me da en toda la yema tocando uno de los temas que más me gustan de este mundo nuestro de locos: Las rehalas y su gente. Y lo hace con ese paladar tan bueno, con ese buen gusto que derrocha Juan en todo lo que tiene que ver con la sierra, con la caza, con los animales. Por si fuera poco lleva una íntima dedicatoria. El que la lleva la entiende.
 No ensucio más esta entrada que lo bueno viene de aquí para abajo:
Recogiendo
La luz se derrite en las cuerdas y el aire mece las jaras y las sombras… La sierra empieza a velar a sus caídos en la refriega de ladras, carreras y pólvora. Los mulos miran con sueño y desaparejados el humo de la lumbre casi apagada mientras los arrieros apuran las caladas de unos cigarros que en la sierra saben mejor…
Y cuando la montería casi termina para todos… ahí sigue él, arrimado a un chisco junto a la suelta echando al aire su caracola para que recorra las entrañas de estas tierras y sirva de guía a aquellos perros que se perdieron con las narices y las orejas embotadas de rastros y carreras. En sus ojos asoma discreta la pena de tener que dejar allí a uno de los suyos mientras brota de su garganta la última llamada.., la más fuerte.. la más triste.., la más clara:
«Ojalá volvamos a vernos compañero…»
 

TOROS Y CAZA